El billete para la Euroliga tendrá que esperar al viernes (97-70)

VALÈNCIA. Un partido para olvidar. En todos los sentidos. Valencia Basket no fue rival ante un colosal Herbalife Gran Canaria que puso el 1-1 en los cuartos de final prácticamente sin despeinarse. El equipo taronja no salió a ganar al pabellón isleño y ya estaba pensando en el tercer partido. Faltó defensa del mejor equipo en estas labores de la liga regular, faltó agresividad, movimiento de balón, participación de los pívots en la pintura... Ni Sam Van Rossom, Fernando San Emeterio ni Bojan Dubljevic pudieron revertir la espectacular actuación de Xavi Rabaseda (22 puntos). Valencia Basket se lo juega todo por lo que ha luchado esta temporada este viernes. La Fonteta dictará sentencia. El ganador será con toda probabilidad equipo de Euroliga. Será con toda seguridad si el Barça gana el tercer partido en el Palau a Andorra o si el equipo del Principado no pase a unas hipotéticas finales (algo que se antoja casi imposible teniendo en cuenta que en semifinales se enfrentaría al Baskonia).

Txus Vidorreta sacó de inicio a los mismos hombres que en el primer partido: Sam Van Rossom, Joan Sastre, Fernando San Emeterio, Will Thomas y Bojan Dubljevic. El segundo partido de los cuartos arrancó con máxima igualdad en el Gran Canaria Arena. Como era de esperar, los de Luis Casimiro estaban más acertados que solo dos días antes en la Fonteta, aunque haciendo mucho daño en la pintura y manteniendo la superioridad en el rebote. Xavi Rabaseda salió de dulce con 9 puntos suyos durante ese primer cuarto. Valencia Basket movió bien el balón, pero sin encontrar a sus jugadores en el poste bajo, sirviéndose de un buen porcentaje en el triple. El equipo taronja necesitaba cerrar más la pintura para evitar canastas fáciles bajo aro, poder defender mejor el rebote y correr. Y es que Oriol Paulí puso la máxima ventaja hasta el momento en 5 puntos tras un corte completamente solo. La salida de Tryggvi Hlinason aumentó la altura taronja para cumplir ese propósito. Rafa Martínez se encargó de poner la mínima con una metralleta desde la esquina al final del primer periodo (22-21).

Aunque el cuarto comenzó con Hlinason poniendo al Valencia Basket por delante, Herbalife Gran Canaria aumentó el ritmo del partido y a golpear en contraataque. El equipo de Vidorreta se empezó a bloquear en ataque, bajó los brazos en defensa durante unos instantes y encajó un parcial de 9-0. Erick Green apareció para frenar esa pequeña sangría, pero a los valencianos les siguió costando encontrar espacios y la máxima renta amarilla llegó a los 9 puntos. Además, los jugadores taronja se estaban cargando de muchas faltas. Los triples dejaron de entrar y los interiores continuaron sin aparecer en la zona ante una defensa canaria muy cerrada. Duros minutos para Valencia Basket, que también vio cómo Dubljevic tenía que sentarse con tres faltas personales. Van Rossom puso la mente fría para anotar desde el perímetro y reducir a 6 puntos. Sin embargo, era difícil recortar ante un Gran Canaria que pasaba constantemente por la línea de tiros libres y presentaba un nivel de agresividad muy superior que le permitió irse con 13 puntos por delante al descanso (46-33). 

El equipo taronja debía mejorar defensivamente, especialmente en el rebote (los canarios habían capturado casi el doble) y las transiciones, además de encontrar más soluciones ofensivas (solo 8 puntos en la pintura frente a los 24 de ellos). En general, Valencia Basket necesitaba un lavado de cara. Rabaseda siguió haciendo lo que quiso tras el paso por los vestuarios y fue aumentando la renta amarilla. Pese al buen acierto taronja, los canarios estaban infalibles y supieron mantener las distancias. Tenían el partido absolutamente bajo control y la ventaja ascendió hasta los 16 puntos. San Emeterio llevó las riendas del equipo en ataque pero su rival seguía sumando. Poco había mejorado el conjunto de Vidorreta en esos 10 minutos aunque todavía no estaba nada perdido (72-57).

El intercambio de canastas era lo último que necesitaban los taronja pero es lo que sucedió. Eriksson inauguró el último periodo con un triple, Mekel guió en ataque, Pasecniks hizo daño en la pintura y el extaronja Pablo Aguilar se encargó de poner una dolorosa ventaja de 26 puntos. Un auténtico baño. El equipo taronja ya tenía en mente el tercer partido que decidirá el pase a las semifinales en la Fonteta. Valencia Basket no fue rival en el Gran Canaria Arena.

- Ficha técnica:

97 - Herbalife Gran Canaria (22+24+26+25): Oliver (5), Radicevic (2), Rabaseda (22), Báez (9) y Fischer (0) -quinteto inicial-, Eriksson (15), Mekel (13), Seeley (0), Balvin (6), Pasecniks (8), Paulí (10) y Aguilar (7).

70 - Valencia Basket (21+12+24+13): Van Rossom (11), Sastre (5), San Emeterio (10), Thomas (6) y Dubljevic (11) -quinteto inicial-, Abalde (2), Vives (3), Buva (2), Green (6), Doornekamp (1), Hlinason (6) y Martínez (7).

Árbitros: García González, García Ortiz y Oyón. Eliminaron por personales a Xavi Rabaseda (m. 37) y Vives (m. 40)

Incidencias: Segundo partido de la eliminatoria de cuartos de final del "play off" al título de Liga Endesa, disputado en el Gran Canaria Arena ante 5.332 espectadores.