VALÈNCIA. Rubén Baraja valoró la polémica generada desde la final del Mundial femenino con el presidente de la RFEF, Luis Manuel Rubiales, por "el piquito" a Jennifer Hermoso, los desafortunados gestos en el palco delante de la reina Letizia y de la infanta Sofía y sus declaraciones posteriores hasta llegar a la asamblea federativa del viernes donde el dirigente advirtió, desafiante, que no iba a dimitir.
El técnico del Valencia destacó que el comportamiento de Rubiales "es inadecuado" y que le provoca "tristeza".
"Este tipo de comportamientos es inadecuado. No estuvo acertado en la forma de actuar. Me gusta que siempre haya respeto, tanto de genero como de etnia. Esta situación ha empañado el éxito de la selección femenina y me provoca un poco de tristeza", explicó Baraja, sin contundencia.
"No tengo toda la información, pero el comportamiento no es adecuado y no está bien. Tengo un montón de cosas en qué pensar en mi día a día como para valorar estas situaciones", agregó.