VALÈNCIA. La decisión de Sanidad de cerrar las puertas de Mestalla y dejar los grandes eventos de la ciudad de Valencia en estas fechas sin control alguno, no puede ser el final del sueño de la remontada, a una noche mágica no se le pueden cerrar las puertas.
El Valencia CF lo tendrá más difícil, sin duda alguna, sin su afición animando desde el minuto uno, sin que los jugadores del Atalanta noten el fuego de Mestalla, que debería ser un infierno en una noche como la de este martes pero no se puede dejar de soñar.
La afición que se agolpe en Mestalla encontrará un impedimento, las puertas esta vez no se abrirán para el público. Las gradas estarán vacías y los asientos seguirán fríos durante el encuentro.
La 'rajada' de Dani Parejo no ha servido para mucho, a excepción de que la gente note el calentón del equipo con la decisión de los políticos, que siguen dando palos de ciego en el control del coronavirus.
Sanidad ha "pisoteado el escudo" del Valencia CF pero no ha tenido el valor de meterse en el terreno fallero o en las manifestaciones del 8M. Los votos son los votos. Porque pese a que no vengan italianos a Valencia para el partido, o no viniesen para ver al Valencia Basket contra el "no se qué de Milano", como dijo Mónica Oltra, la decisión es "irrevocable", no habrá público en Mestalla.
En lo futbolístico, Celades podría alinear a Coquelin de central tras no llegar Eliaquim Mangala. Además de la 'vuelta' de Florenzi en la Champions League.
El 4-1 de la ida hace que el conjunto blanquinegro no pueda salir a especular y en un intercambio de golpes el Atalanta se vuelve muy peligroso, con un ataque muy rápido y efectivo, cómo ya demostró en San Siro, y con un Duvan Zapata ya en perfectas condiciones junto a Ilicic, 'Papu' Gómez y Muriel.
El posible once del Valencia CF podría estar formado por Cillessen, Gayà, Diakhaby, Coquelin, Wass, Parejo, Soler, Ferran, Cheryshev, Gameiro y Rodrigo Moreno, tal y cómo ensayó el técnico este lunes.