VALÈNCIA. El Circuit Ricardo Tormo acogerá desde el próximo fin de semana dos citas decisivas del Campeonato del Mundo de Motociclismo, el Gran Premio de Europa el día 8 y el Gran Premio Motul de la Comunitat Valenciana el 15 de noviembre, bajo estrictas medidas de seguridad ante la pandemia de COVID-19 que ha trastocado los planes del mundial desde el inicio de la temporada.
Una burbuja de unas 1.500 personas forma el paddock del mundial de motociclismo bajo la experta organización de Dorna, la empresa que gestiona los derechos del mundial. Todos ellos han pasado por varios test PCR con los que se asegura mantener a raya la propagación del virus dentro de la familia mundialista. En Cheste, este colectivo se unirá al de la organización del propio Circuit Ricardo Tormo, que también deberá ajustarse a un severo protocolo que maximiza la seguridad para que pilotos y equipos lleguen sin mayores novedades al último gran premio que este año se celebrará en Portimao.
Con ese objetivo el campeonato ha implementado durante las carreras que ya se han llevado a cabo un efectivo sistema de control en el que los integrantes de la burbuja van pasando por pruebas PCR que quedan reflejadas en una aplicación informática que les da acceso a las instalaciones del circuito en el que se desarrolla el Gran Premio, en este caso el Circuit Ricardo Tormo.
En el acceso principal del Circuit la organización ha instalado un laboratorio para realizar las pruebas PCR a todas aquellas personas que formen parte de la burbuja del paddock
En la entrada un equipo de seguridad les espera para comprobar la aplicación, tomarles la temperatura y ofrecerles gel hidroalcohólico. Igual que en el resto del territorio el uso de mascarillas y la distancia social son obligatorias en el Circuit que ha restringido los aforos, ha multiplicado la limpieza y ha obligado a mantener ventiladas todos sus espacios interiores.
Casi toda la acción se verá afectada. Además de ver las carreras sin los miles de espectadores de las gradas de Cheste, tendremos la oportunidad de ver a los mecánicos con mascarillas y protectores faciales, la distancia en el parque cerrado después de cada calificación o carrera, las entrevistas a los protagonistas con una amplia distancia con los periodistas, la ceremonia del podio sin contacto físico y un sinfín de novedades para evitar la propagación del virus.
El ayuntamiento de Cheste ya ha anunciado el cierre perimetral de su casco urbano para evitar que los aficionados trate de organizar allí la fiesta que no tendrá lugar en el Circuit. Asimismo, todos los accesos del Circuit Ricardo Tormo quedarán cortados salvo el acceso principal a través de la salida 334 de la autovía A-3, en la rotonda de acceso se controlará la acreditación de todos los vehículos que quieran acceder a las instalaciones de Cheste.
La entrada al recinto quedará modificada de manera que todos los integrantes de la familia del mundial entrarán a través del acceso entre el aparcamiento y el propio paddock, sin pasar por la puerta principal que quedará fuera de la burbuja.