Quiero una camiseta oficial para Peter Lim

VALÈNCIA. El máximo accionista del Valencia debería jugar él los próximos partidos.

La distancia que separa Singapur de Valencia cada día es más enorme. Solo tenemos de contacto a un tipo que se llama Murthy y que ha logrado hacer de las mentiras continuas y con mala saña su estilo de vida. El dueño del Valencia vive lejísimos y aquí nos ha dejado a un mentiroso compulsivo que solo trata de engañar al personal y de hacerle la pelota a su jefe, que es del que cobra más dinero del que hubiéramos pagado por Murillo para reestablecer una defensa que se cae a pedazos. Culpa de Murthy por mentiroso y más culpable de todo el propio Peter Lim por cara dura y no afrontar como toca un mínimo de dignidad al frente de la entidad que tristemente representa.

Una Mentira tras otra

Y el ejemplo del Valencia es francamente angustioso y terrible. Murthy vive en la mentira de forma continua y considera a los valencianos y no valencianos seguidores del Valencia como una raza inferior a la que no importa tomarle el pelo de una forma tan vulgar como absurda. Y el fondo de todo este sistema es simple y llano. El Valencia duele más que nunca a lo largo de la historia -y mira que ha habido presidentes impresentables, pero nunca tan déspotas como en estos momentos- y es complicado pensar o planificar una respuesta adecuada para que este club vuelve a ser un equipo de fútbol querido por todos sus aficionados y respetado por el mundo del fútbol en general. 

Peter Lim da pena

Yo ya tengo claro que nunca seré millonario, si eso significa estar a la altura o ser parecido a un tipo como Peter Lim que no para de tomarnos el pelo a todos de una forma ignominiosa. Y lo grave del asunto no es que sea de una forma ignominiosa. Lo grave de verdad, lo dantesco, es que a Peter le importa un pepino la afición del Valencia y que un niño de unos seis años haya heredado la pasión por este equipo de un abuelo que ya no está entre nosotros. Ser del Valencia es casi una forma de vida para todos aquellos que sienten que son parte de este club y que suspiran por cada victoria. Y eso sigue igual... menos para el dueño de verdad de esta institución que nunca ha caído tan bajo como ahora.

Y se la sopla

Lo peor de todo es que a Lim y al hombre que tiene aquí haciendo de bufón de la corte se la sopla lo que sientan los aficionados. Ellos viven en otro mundo y no tienen el más mínimo respeto hacia el personal que familiarmente ha heredado un sentimiento de pertenecer a unos colores como los valencianistas. Simplemente no existimos para el día a día del club, ni para nada.

Complicada solución

Y el problema más grave es que no existe de verdad ninguna solución más o menos asequible sobre la faz de la tierra valenciana. Ellos mandan, ellos seguirán tomándonos el pelo, nosotros seguiremos siendo del Valencia y la distancia entre el máximo accionista y tu vecino aficionado del club cada vez será más inmensa.

El culpable

Puedo echar un vistazo mirando todo lo que ha pasado y buscando culpables de la situación. Pero eso da igual. Lo importante de verdad es que tenemos a un tipo al que se la sopla todo al frente de la nave y a un segundo de ese tipo, hablo de Murthy, que solo siente desprecio por todo lo que hemos heredado a lo largo de 101 años de historia con toda la sinceridad del mundo.

Y vuelve LaLiga

Y sí, estamos en la Liga y tenemos un entrenador tan engañado por el máximo accionista como lo estamos todos nosotros. Gracia, lo miremos como lo miremos, está tan estafado y engañado como lo estamos todos nosotros. Y como yo no veo solución real ni a corto ni a largo plazo, me voy a tomar el atrevimiento de pedirle a los jugadores que se dejen los huevos en cada partido. Esa mínima ilusión no me la puede quitar ni Peter Lim. Y con eso tan simple y tan poquita cosa me conformo en estos momentos.