VALÈNCIA. La vida tiene en ocasiones coincidencias muy curiosas, y si no que se lo digan a Gabriel Paulista. En su segunda temporada en el Valencia CF y en la competición de la Europa League el defensor brasileño se va a a enfrentar de manera consecutiva a su pasado ya que jugó los cuartos de final ante el Villarreal y hará lo propio en semifinales ante los ingleses del Arsenal.
El central llegó en 2013 con tan sólo 22 años a la liga española y al Villarreal de la mano de Marcelino García (su actual técnico) y sus comienzos no fueron nada alentadores. "La adaptación me costó una barbaridad, parecía que se me hubiera olvidado jugar al futbol. En ocasiones me iba a casa tremendamente desmoralizado y al borde del llanto. Yo mismo me preguntaba qué me había pasado porque me estaba dando cuenta de que no estaba rindiendo como debía. Sin embargo Marcelino me ayudó mucho, y poco a poco fui ganando seguridad hasta que el míster consiguió sacar lo mejor de mi", recordaba el brasileño en una entrevista concedida la pasada temporada al programa "90 Minuts" de CV Ràdio. Gabriel estuvo en el bando ganador en la eliminatoria de cuartos de final en la que su actual equipo, el Valencia CF ganaba al Villarreal CF a doble partido. Disputó entero el partido de ida donde el resultado fue de 1-3 y jugó la segunda parte del partido de vuelta en la que bajo una impresionante tromba de agua el València CF remató su pase a semis con un plácido 2-0.
Y tanto que Marcelino consiguió sacar lo mejor de Gabriel, dos temporadas y 50 partidos después (verano del 2015) el Arsenal de Arsène Wenger llamaba a la puerta de del equipo de La Plana, dejaba 15 millones en la caja y se llevaba a Gabriel para jugar con los Gunners.
No firmó malos números en Londres. Por ejemplo en la Premier y en las dos campañas en las que militó con los "Gunners" fue 37 veces titular, sustituido en 9, al banquillo fue 34 ocasiones, suspendido 1 vez, y lesionado 7. La parte dulce de su periplo londinense fueron las dos FA Cups y Community Shields conquistadas en 2015 y 2017. La parte amarga es que no pudo disputar ninguna de las cuatro finales. En la de 2015 y con victoria 4-0 ante el West Ham, Wenger no lo alineó ni un sólo minuto; y en la de 2017 con triunfo 2-1 ante el Chelsea una lesión de rodilla le apartó de ser titular después de jugar los 120 minutos de las semis a partido único ante el Manchester City. Exactamente la misma suerte corrió en las Community Shields de esos dos años: suplencia en 2015 y lesión en 2017.
Por tanto hay una revancha pendiente. "Nos toca correr, morir y ganar para llegar a la final. Primero tienes que estar muy concentrado en el partido; defender muy bien y luego tener personalidad con el balón, jugar e intentar marcar algún gol" declaró el lunes en una entrevista al programa "El tercer tiempo" del canal Vamos, de Movistar.
Correr, morir y ganar, podría ser perfectamente el lema de este brasileño que nunca baja los brazos y cuya competitividad le ha hecho convertirse en uno de los futbolistas de confianza de Marcelino García Toral.