Hoy es 14 de octubre
VALÈNCIA. El Valencia CF no se ha presentado a la reunión definitiva con el Real Betis y la Real Federación Española de Fútbol en la cual se debía determinar el reparto definitivo de las entradas para la final de la Copa del Rey del 23 de abril en La Cartuja.
El martes ambos presidentes quedaron emplazados de común acuerdo con Luis Rubiales y fijaron la fecha del viernes para zanjar el operativo de la final. En esa primera reunión, Anil Murthy garantizó ante una treintena de personas al 100% su asistencia al encuentro del viernes. La ausencia del Valencia sorprendió en el estamento federativo y en el andaluz porque tanto Ángel Haro, presidente bético, como Rubiales accedieron a cambiar la fecha de la primera reunión a petición de Anil Murthy, que no podía asistir por un problema familiar. Pese a aquella deferencia, el Valencia decidió no presentarse a este segundo encuentro.
El Valencia no comunicó hasta las 12:30 horas del mediodía que no iba a acudir a esta segunda reunión ante el evidente enfado del presidente bético Ángel Haro, quien tuvo que viajar toda la noche desde Frankfurt para poder estar a tiempo en una reunión en la que los rectores valencianistas decidieron no estar.
Pese a a ello, el presidente Luis Manuel Rubiales y la Real Federación Española de Fútbol mantienen su compromiso de otorgarle a cada equipo el 40% (20.757 del aforo total) de las entradas del total del aforo vendible mientras que el 20% restante quedará para compromisos federativos. Cabe recordar que, según lo estipulado en los estatutos federativos, el reparto corresponde a un tercio del aforo para el organizador y para cada uno de los equipos que luchan por el título, aunque la Federación ha cedido parte de su cupo.
Aún con el mal ambiente generado por esta espantada, el organismo federativo entiende que la afición valencianista no debe salir perjudicada por esta maniobra difícilmente calificable por parte de los dirigentes actuales del club de Mestalla.
Desde la federación se informó de que por parte del Valencia, que notificó su ausencia esta misma mañana, no hubo representación alguna para tratar de cerrar el aumento de porcentaje de entradas para sus aficionados. Mientras, desde el club de Mestalla se aseguró a EFE que la ausencia se debió a que se consideraba que era un asunto que se podría resolver vía telemática.
La RFEF recordó que aunque en sus estatutos se estipula que en el reparto un tercio del aforo corresponde al organizador y los otros dos a cada uno de los clubes que luchan por el título, finalmente ha cedido parte de su cupo.
El precio de las entradas oscilará entre los 30 euros -con visibilidad reducida- y los 222 euros, y cada club recibirá igualmente un paquete de entradas de diversidad funcional para sus seguidores.
La próxima final de la Copa del Rey será transmitida en directo en más de 160 países y será la más seguida de la historia a nivel internacional.