La portería, la gran decisión para Calleja y Unanua en la final del play-off

VALÈNCIA. Uno fue el portero titular indiscutible del Levante durante 34 jornadas, a gran nivel, donde se erigió como uno de los metas más imbatidos y de mejor rendimiento de la Segunda División. El otro, cogió el testigo en la 35 y se ha logrado reponer a los titubeos para acabar cogiendo con fuerza las redes del Ciutat y dar plenas garantías a su entrador. Dani Cárdenas o Joan Femenías, esa es la cuestión que tiene ahora mismo el tejado de Jesús Unanua y el resto del cuerpo técnico del Levante. Es la principal parcela donde habrá de decidir Javi Calleja en el encuentro de Mendizorroza, junto con otros focos como el de la pareja de centrales -con o sin Róber Pier- o el ariete -Wesley, que era el elegido para el Belmonte, y Bouldini pugnarán por la posición-. 

¿El regreso de Cárdenas?

Lo que está claro es que la suerte esta vez le ha dado la espalda al de Terrassa. Tras lesionarse del tobillo en un entrenamiento tras un lance fortuito y desafortunado, y después sobre todo de pasar por quirófano, llega recuperado al play-off. Cumpliendo el plan y sus tiempos. El 'problema' para el '1' es que su compañero y amigo bajo palos, el 'soci' -así es como se llaman cariñosamiente en el vestuario-, ha rendido a buen nivel en el tiempo en que Dani ha estado ausente. De hecho, es que el propio arquero catalán sigue apareciendo entre los tops de la categoría: Cárdenas es el cuarto portero con más porterías a cero de Segunda (17), los mismos partidos, precisamente, que el guardián de la meta del oponente definitivo por el regreso a la élite: el valenciano Antonio Sivera.

Joan Femenías, en forma

Lo que parece complicado es sacar a Femenías de la portería justo ahora. El balear no tuvo demasiado trabajo el miércoles, pero paró lo que tuvo que parar. Ha recibido siete tantos en diez partidos y, después de restar la práctica totalidad del curso -excepto en Copa- relegado al banquillo, fue respondiendo con el paso de las jornadas. Del titubeo inicial a un buen sabor de boca que hace que la opción relativamente sencilla en lo que a gestión mental se refiere sea darle las llaves de la portería también en el doble encuentro final.

Sea como sea, la decisión está por tomar y Calleja ya insistió en los dos encuentros de la semifinal, los primero de regreso de Cárdenas a las convocatorias, en que la portería no es inamovible. No habló de repartir minutos, pero sí de que ni Femenías iba a mantener el puesto por inercia ni tampoco de que el absoluto liderazgo del de Terrassa iba a posibilitarle volver a la titularidad por decreto. Es el gran foco del once.