VALÈNCIA. El ascenso del abogado Javier Solís hasta ocupar la dirección corporativa y la portavocía del Valencia CF es el penúltimo cambio de la presidenta Layhoon Chan en el club de Mestalla, que sigue a la espera del fichaje de un director de fútbol que complete y dirija la parcela deportiva de la que depende el primer equipo.
Desde su regreso a la ciudad, primero como negociadora por el tema del estadio y, al mismo tiempo, como informadora para Peter Lim, y luego como presidenta, Layhoon decidió hacer cambios en la estructura del club. Su intención era reforzar el "gobierno local" con gente afín a su persona, válida y formada en la entidad.
El organigrama se ha definido en las últimas fechas. Con Anil Murthy de presidente, todas las parcelas del club colgaban de las funciones de Joey Lim, Teo Swee Wei y Sean Bai, los tres ejecutivos de confianza que estaban por debajo de presidencia en la anterior estructura. El despido fulminante de todos ellos y la reaparición de Chan ha provocado que los empleados al frente de las diferentes parcelas del club, que ya existían pero eran dependientes del gobierno de Murthy, ganen en responsabilidad y autonomía. Layhoon queda liberada de la gestión del día a día, delegando en profesionales fieles y competentes.
El armazón del Valencia, actualmente, parte de la presidencia, ocupada por Layhoon Chan. Por debajo, se ubican diferentes áreas. La Financiera, con Inma Ibáñez al frente; la Corporativa con Javier Solís, la de Operaciones con Christian Schneider, la de Marketing con Jorge García, la de la Academia con Luis Martínez o la de Comunicación con Javier Latorre. La gente que más peso específico va a tener en la nueva organización son Inma Ibáñez, Jorge García, Javier Solís y Christian Schneider.
El primer equipo es una de las secciones que todavía está sujeta a cambios. Está dentro del área deportiva, que engloba, además, la de Academia, Secretaría técnica, Servicios Médicos y 'Team Manager'. La parcela, actualmente, la lidera Gennaro Gattuso que opera como un manager general a la inglesa, esto es, un técnico plenipotenciario con voz dominante en los fichajes además de en los entrenamientos. La fórmula es habitual en Meriton, que ya la llevó a cabo con Nuno Espírito Santo o Marcelino García Toral.
Las palabras de Gennaro Gattuso, en la rueda de prensa previa al partido contra el RCD Espanyol, donde aludió a la reunión en Singapur con Peter Lim, dieron a entender que el club ya no busca un director deportivo porque esas funciones las asume el italiano. "La prioridad ahora no es el director deportivo, se lo he dicho a Lim. Creo que lo mejor, ahora mismo, es seguir en esta dirección; lo pienso de verdad. Le he dicho a Lim que lo mejor es seguir", indicó el calabrés.
La realidad, según ha podido conocer Plaza Deportiva, es que el Valencia sigue tras un director de fútbol -con ese cargo, exactamente- que completaría la parcela del primer equipo. Lo que Gattuso quiso decir es que después de que se haya puesto a rodar la temporada sin esa figura, es mejor incorporarla sin prisa durante los próximos meses para que se ponga a trabajar en la próxima temporada. Gattuso conoce el nombre de los candidatos descartados y de los que hay encima de la mesa. El mercado es reducido y particular y el que opta a ese cargo en el Valencia ha de entender, además, que su autonomía en las entradas y salidas de jugadores estará restringida porque en cualquier momento puede haber una intromisión del máximo accionista, Peter Lim, y de su consejero Jorge Mendes.
Mientras, el club espera al director de fútbol con una estructura definida que cuenta con un entrenador y un secretario técnico que trabajan en sintonía. El objetivo es potenciar esa sección con un profesional del fútbol que todavía no se ha encontrado en el mercado.
El Valencia trató de cerrar antes del inicio de la temporada un proceso de selección que abrió en verano, pero ninguno de los candidatos acabó firmando, bien porque las condiciones ofrecidas no encajaban en ninguno de ellos bien porque el club no podía cubrir sus expectativas. No hubo un punto de acuerdo y el club continúa con ese proceso abierto. El mercado es complejo y no se va a fichar por fichar. Esa incorporación requiere tiempo y se esperará.
La clave es traer a un ejecutivo que, de verdad, potencie esa parcela, que tenga un valor añadido y reúna una serie de condiciones como experiencia o capacidad negociadora, que, al mismo tiempo, pueda tener atribuciones de portavoz deportivo y que potencie la estructura que el club ya ha definido con Gattuso y Corona.
La Fundación VCF, de momento, pese a que está delimitada, no tiene una cabeza visible tras la salida de Teo Swee Wei. El tiempo dirá si Meriton decide destacar a algún responsable.