VALÈNCIA. En uno de los cónclaves más breves de la historia del club -apenas tres horas- desde que se constituyó como Sociedad Anónima Deportiva, el Valencia CF celebró este viernes su Junta Ordinaria de Accionistas en la primera ocasión que dicha asamblea se desarrollaba sin público y de manera telemática. Estas fueron las principales conclusiones.
La Junta estaba convocada para este viernes 11 de diciembre a las 11h en primera convocatoria en Feria Valencia, lugar al que deberían acudir -independientemente de que el resto de accionistas participasen de manera telemática- los miembros del consejo de administración y representantes legales. Sin embargo, las primeras imágenes del ‘feed’ de la asamblea hicieron evidente que se había producido un cambio de ubicación. A pesar de que la convocatoria pública de la Junta remitía a Feria Valencia, la reunión y retransmisión del acto se produjeron en la sala de reuniones de la quinta planta de las oficinas del club, sitas en la Plaza del Valencia CF, número 2, enfrente del Camp de Mestalla. Desde el club aludieron al texto del complemento a la convocatoria de la Junta (“conforme a lo previsto en el artículo 40.1 del RD 8/2020, la Junta se considera celebrada en el domicilio social de la Sociedad”) para justificar un cambio de lugar “irrelevante y que no afecta a los accionistas”.
Desde las 11:20 hasta las 12:40h del mediodía, el secretario Germán Cabrera y el abogado del club Javier Solís alternaron en la lectura de las preguntas recogidas en los últimos días en la plataforma habilitada por el club, muchas de ellas con la voluntad de que constasen en el acta de la Junta. El número total rondó las 70 preguntas o mensajes, aunque algunos accionistas –como varios miembros del colectivo ‘Últimes Vesprades a Mestalla’- denunciaron en redes que el club omitió las cuestiones que ellos plantearon. Todas las preguntas eran ya conocidas por los miembros del consejo previamente al arranque de la Junta, por lo que no hubo capacidad para la sorpresa. Murthy fue el primero en levantarse una vez se finalizó el turno de preguntas, durante el breve receso que le siguió.
Murthy no puso paños calientes a lo que está por venir. Y lo que está por venir son más ventas de futbolistas para cuadrar la caja: “Nos esperan dos años difíciles y habrá ventas adicionales de jugadores", declaró durante su larga intervención, en la que respondió a algunas de las cuestiones planteadas. El presidente admitió la dificultad de la situación económica actual a nivel mundial y recordó que “se ajustará el coste de plantilla” a esta nueva realidad.
El dirigente no tardó demasiado en repetir el mantra de los últimos meses: Peter Lim no va a dejar el Valencia. “Ya hemos dicho muchas veces que Meriton no vende. Es más, lo único que ha hecho el señor Lim es seguir metiendo dinero en el club. Su compromiso en la continuidad se demuestra con esta gestión responsable en una época tan difícil como la actual”, dijo el presidente. Murthy volvió a reiterar las cuatro patas del ‘business plan’ del Valencia a medio y largo plazo: estabilidad financiera, estabilidad deportiva, implicación social y la Academia VCF.
Aunque en las últimas fechas el alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha recordado en varias ocasiones la situación de la ATE y la inacción del Valencia, Murthy no parece estar demasiado preocupado por las urgencias del consistorio. “No podremos acabar el estadio si no vendemos Mestalla, es una realidad que no podemos obviar. Este tema tiene muchas patas”, dijo en la Junta tras confirmar que pedirán una prórroga del plazo de la ATE –que vence el 15 de mayo de 2021- al Ayuntamiento. “No acudiremos a las instituciones hasta que tengamos algo en firme, es algo que siempre hemos manifestado. Queremos comunicar novedades cuando tengamos la oferta que nos garantice que no haya fallos y podamos seguir tratando este tema de institución a institución”, agregó. No tardó la vicealcaldesa en salir al paso: apenas minutos después de la conclusión de la Junta, Sandra Gómez reiteró en Radio Marca Valencia que fueron desde el Valencia CF “quienes negociaron los plazos” de la ATE, “así que no tiene sentido que pidan un nuevo calendario”. Además, incidió en que “para pedir, hay que dar” y que “en estos momentos” al Ayuntamiento solo le vale “una voluntad clara de dar solución a este problema”.
El presidente expuso las dos líneas de crédito abiertas por Peter Lim con el club: un préstamo en la temporada 2014-2015 por valor de 38 millones con un tipo de interés del 2,8% anual, garantizado con la pignoración de los derechos de cuatro jugadores de la primera plantilla y el 20% de los derechos de televisión; y otro préstamo por 6,5 millones de euros firmado el pasado 30 de junio de 2020, garantizado con la pignoración de otros cuatro jugadores y con un tipo de interés del 3%. “No entendemos necesario facilitar los nombres de los jugadores cuyos derechos están pignorados, se puede generar controversia con sus nombres perjudicando la posición del club”, indicó Murthy.
“Es falso que Anil Murthy o Peter Lim hayan mencionado una sola vez que la afición del Valencia CF es racista”, se defendió el dirigente cuando se le inquirió sobre la política de comunicación del club con los medios extranjeros. El presidente lo tildó de “fake news” y dijo que le sorprende “esa falsa percepción”. Consideró intolerable la violencia y el abuso verbal, y aprovechó para ensalzar a Batzine (“es una revista enfocada a valencianistas que viven en Asia, un fanzine externo con el que colaboramos para asegurar una exposición en países estratégicos”) y a VCFMedia –los medios oficiales de radio, televisión e Internet del club- como una “referencia informativa” en contraste con los medios de comunicación tradicionales: “Es un canal que genera contenidos propios, sin filtros, al aficionado. Sin interés”. Quiso diferenciarlo de “otros medios empeñados día tras día en ofrecer una información sesgada o interesada de los hechos, incluso periódicos históricos. Piensen en la intención que hay cada vez que leen un artículo o programa de radio; si hay intención informativa o hay algo más”. Quiso ejemplificar con la información desvelada hace semanas de que el Valencia se ha planteado prescindir del descuento para accionistas en los pases de temporada de cara al año que viene (“otra vez son fake news, en estos momentos no hemos establecido aún la campaña de abonos”).
Murthy no dio demasiados rodeos a la hora de explicar el incremento del número de acciones (de 9 a 3.598 a partir del año que viene) para la asistencia de cualquier accionista a las juntas. “Este incremento permitirá un mejor y más ordenado desarrollo de las juntas y posibilitará, a futuro, la celebración de juntas íntegramente de forma telemática a través de sistema de videoconferencia si fuera necesario”, se limitó a leer de un papel. “No creemos que los derechos de los accionistas se vean limitados”, agregó, acogiéndose al ‘uno por mil’ de la Ley de Sociedades de Capital.
“Me preguntan por qué no me reúno con individuos de asociaciones que han manifestado públicamente que su único objetivo es echar a Meriton del club y cambiar la propiedad”, dijo Murthy. Dijo que no entra dentro de sus funciones, como presidente, valorar operaciones corporativas de compraventa de las acciones, “más aún cuando hemos insistido por activa y por pasiva en que el club no está en venta”. Además dejó un dardo para Juan Martín Queralt y líderes de otras plataformas al decir que han antepuesto “en sus últimas actuaciones” el emprender medidas judiciales antes que “buscar una reunión”.
Anil Murthy explicó lo evidente (que su cargo es el de presidente ejecutivo) pero también arrojó luz sobre las diferentes funciones y cometidos del resto de ejecutivos. Kim Koh ejerce de consejero ejecutivo “encargado de la supervisión de diferentes áreas del club”. Joey Lim es el nuevo director de Administración del club, Sean Bai es el director de la Academia VCF y Teo Swee Wei es el director de la Oficina del presidente. “Todos somos profesionales de acreditada experiencia en el sector empresarial”, concretó. Respecto a sus sueldos, se remitió a la memoria anual; allí, en el apartado 15 (“información relativa al personal de alta dirección”) se desvela que los ejecutivos percibieron en global 2.037.000 euros en el ejercicio 2019-2020.
“Estamos muy tristes por la salida de los dos consejeros valencianos”, dijo el presidente. Además de lamentar el fallecimiento de Juan Cruz Sol (“una leyenda y un embajador excepcional”), dijo respecto a la dimisión de Jose Luis Zaragosí que se trata de “un gran valencianista que trató de dar lo mejor” para ayudar al club “de forma desinterasada”. Murthy denunció “el trato recibido, con muestras de acoso y violencia incluso en su consulta médica”. Tampoco le gustó “el nivel de crítica injusta por parte de algunos medios”, recalcando un artículo de opinión de un medio concreto –sin nombrarlo- que le comparaba con los colaboracionistas del gobierno de Vichy. “Es inaceptable, es triste que un periódico tan antiguo no entienda la diferencia al hablar algo así”, dijo el dirigente, que confirmó que siguen buscando “buena gente y profesionales” para el consejo, “y por supuesto, si pueden ser mujeres, mucho mejor”.
Hay siete profesionales que conforman, en la actualidad, la secretaría técnica del Valencia CF. “Su función principal, además de estar en el día a día, es la búsqueda, seguimiento y rastreo de posibilidades de mercado para el club”, declaró. No todo es apostar por la Academia, también es “apostar por jugadores que tienen cabida y van a mejorar el primer equipo”.
En la única referencia al entrenador a lo largo de su intervención, Murthy manifestó que Javi Gracia “era consciente de la profunda remodelación” de este verano. “Es trabajo de todos adaptarse a las situaciones cambiantes. Confiamos en la actual plantilla y cuerpo técnico, encabezado por un gran entrenador como es Javi Gracia”, agregó. También dijo estar “muy feliz” de los cuatro “estupendos capitanes” que representan “perfectamente nuestros valores”.
El cierre de la Junta correspondió de nuevo a Murthy, quien retomó brevemente la palabra tras conocer los resultados de las votaciones para “apelar a la gran mayoría de aficionados”. A pesar de las críticas recibidas por la dirigencia, pidió nuevamente unión tanto en el entorno como dentro de Mestalla: “Los jugadores no pueden sentir esa conexión con los aficionados (…) Todos compartimos objetivo común y todos queremos lo mejor para el equipo. Evitemos recrearnos en lo que no estamos de acuerdo y concentrémonos en ayudar al equipo. Hay un gran ambiente de fútbol y familia en la Ciudad Deportiva de Paterna", sentenció.
La conclusión de la Junta 2020 siguió los cauces previstos: todos los puntos del orden del día fueron aprobados gracias al rodillo accionarial de Meriton con el 84,78% de los títulos. Joey Lim ya es nuevo consejero del club, Ernst & Young renueva como auditor, todos los miembros del consejo a esta fecha renuevan en sus cargos y el Artículo 11 de los estatutos ha sido modificado de manera crucial; a partir de 2021, harán falta como mínimo 3.598 acciones –propias o delegadas- para estar presente –físicamente o telemáticamente, algo de lo que Murthy ya avisó durante su discurso- en las próximas asambleas. Es el fin del pequeño accionista en las juntas anuales tal y como lo conocimos desde 1993.