La venta del futbolista portugués ha provocado que se aceleren las conversaciones entre Valencia CF y Barça para que los dos jugadores lleguen a préstamo para la próxima temporada
VALENCIA. El traspaso de André Gomes ha agilizado las conversaciones entre el Valencia CF y el FC Barcelona para que Martín Montoya y Cristian Tello lleguen a Mestalla. Ninguno de los dos jugadores cuentan para Luis Enrique, quien ya les ha pedido que se busquen salida, después de una temporada de cesiones.
El que está más cerca de recalar en la ciudad del Turia es Montoya. El lateral viene de una temporada agridulce. Comenzó el año cedido en el Inter de Milán, pero el mal rendimiento del canterano azulgrana llevó a que la entidad italiana rompiera el acuerdo de cesión. Tras el fin de su estancia en el Giuseppe Meazza, el defensa volvió a LaLiga, para acabar la temporada a préstamo en el Real Betis. Vestido de verdiblanco, Montoya se hizo con la banda derecha y acabó recuperando sensaciones.
Al futbolista le motiva la posibilidad de lucir de blanquinegro, ya que es la mejor propuesta deportiva que le ha llegado a la puerta. Además, cuenta con el visto bueno de Pako Ayestarán y de Suso García Pitarch, que verían con buenos ojos su llegada para sustituir a Barragán y competir por la titularidad del carril diestro con Joao Cancelo.
Por otro lado, la posibilidad de Cristian Tello es más complicada. El extremo también convence al cuerpo técnico valencianista, por su velocidad y descaro, pero cuenta con dos grandes obstáculos. El principal, un salario elevado para las aspiraciones económicas del VCF, que obligaría al Barça a pagar una parte de la ficha. El otro gran escollo es que su prioridad es jugar otro año en la Fiorentina, equipo donde dejó buenas sensaciones en la segunda mitad de la pasada campaña y con el que tiene avanzadas las negociaciones. Sin embargo, no es una opción que esté ni mucho menos descartada.
Por el momento, parece ser que tanto el futuro de Montoya como el de Tello se resolverá en los próximos días. Ambos futbolistas no estaban citados por Luis Enrique hasta el 8 de agosto para empezar a entrenarse con el grupo, pero decidieron acogerse al convenio de la AFE para poder ejercitarse con el resto del grupo. Vista la situación, todas las partes están interesadas en que las salidas de ambos jugadores se concreten cuanto antes.