VALÈNCIA (EFE). El base belga Sam Van Rossom arrastra un pequeño problema en la rodilla izquierda, de la que fue operado hace dos años, y está casi descartado para el encuentro de la Euroliga de este martes ante el Panathiniakos aunque no para el del viernes ante el Maccabi Tel Aviv en este mismo torneo.
Según explicó el técnico Jaume Ponsarnau, aunque afecta a la rodilla operada “se ha descartado que tenga relación con eso, pero hace falta prudencia”.
Van Rossom ya viajó con molestias en la articulación al encuentro del pasado viernes en la pista del Bayern Múnich y apenas estuvo seis minutos en la pista.
“Contamos con que Sam no va a poder jugar. El otro día estaba casi descartado antes, se volvió a resentir y vamos a tener que esperar. No es grave pero tendremos que esperar, difícilmente estará para este partido”, explicó.
Aún así, el técnico cree que podría recuperarlo para los otros dos choques de esta semana. “Para este está casi descartado pero pinta bien para los siguientes”, apuntó.