VALÈNCIA. Valencia se ha teñido una vez más de taronja. Valencia Basket ha celebrado su cuarto título de la Eurocup por todo lo alto en el centro de la Ciudad del Turia. Y una vez más, se ha demostrado que Valencia ama el baloncesto. Valencia es baloncesto. Solo dos años después de haber paseado por las mismas calles con el título de Liga, la comitiva taronja encabezada por Juan Roig repetía itinerario para ofrecer el gran trofeo de Eurocup a las instituciones públicas y a la afición.
La primera parada era la Basílica de la Mare de Déu donde esperaba el Arzobispo de Valencia Antonio Cañizares. Allí, los capitanes Rafa Martínez y Bojan Dubljevic dejaron la Copa a los pies de la Geperudeta, a la que realizaron también una ofrenda con flores. El de Santpedor dijo unas palabras y el acto se cerró con el himno a la Mare de Déu.
Centenares de personas se arremolinaban a las puertas de la Basílica y formaron un improvisado pasillo que llegaba hasta el Palau de la Generalitat, al otro lado de la plaza de la Virgen, que tenía un espectacular color 'taronja' con las camisetas y bufandas de los aficionados. Ya en el siguiente destino, tuvieron turno de palabra el Presidente de la Generalitat Ximo Puig, la Vicepresidenta Mónica Oltra y el Presidente del Valencia Basket Vicente Solá.
Justo a la salida del Palau de la Generalitat había montado un escenario con el lema "Enhorabona Campions" donde fueron subiendo jugadores y cuerpo técnico de uno en uno con toda la afición del Valencia Basket entregados y la charanga animando la tarde. Solo faltaba uno por llegar. El capitán. Los seguidores taronja le empezaron a aclamar hasta que finalmente Rafa Martínez apareció con el trofeo en mano. Oh capitán, mi capitán.
Con la noche ya empezando a caer, la última parada esperaba la llegada de toda la expedición: el Ayuntamiento. El Valencia Basket tuvo su gran recibimiento con cientos de aficionados agolpados a las vallas que guardaban el paso para el autobús. Pero antes del ansiado momento en el balcón, tocaba seguir el protocolo institucional. En el Salón de Cristal esperaban Maite Girau, concejala de deportes, y Joan Ribó, alcalde de Valencia, donde ambos intervinieron.
La salida al balcón no tardó en llegar. Uno a uno, jugadores y cada uno de los miembros del staff del Valencia Basket presentaron sus respetos a la afición congregada bajo el Ayuntamiento. Como marca la tradición, también uno a uno los miembros de la plantilla se dirigieron brevemente a los seguidores presentes.
Los extranjeros Matt Thomas, Mike Tobey, Louis Labeyrie y Aaron Doornekamp chapurreando un poco de español. O intentándolo. Will Thomas librándose de tener que hablar en público dejando caer el micrófono al suelo. Van Rossom haciendo gala de su avances con el valenciano. San Emeterio pidiendo volver al balcón en junio con el título de Liga. Juan Roig interviniendo también y coincidiendo con las palabras del cántabro pero añadiendo, además, que se ganará la Euroliga cuando esté el nuevo Arena. Una escena con muchos momentazos.
Y con el 'Freed from desire' como himno oficial de los éxitos del Valencia Basket, se cerró una agradable jornada de celebraciones del Rey de la Eurocup. Al menos de cara al público. Todos los miembros del club prolongaron la fiesta con una cena en L'Alqueria del Basket por todo lo alto, con fuegos artificiales incluidos.