El Levante se encarrila
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| 04/06/2023
VALÈNCIA. El Levante ha regresado a la senda de la confianza. La victoria del sábado en el Carlos Belmonte devuelve al equipo de Javi Calleja parte del crédito perdido tras no lograr aprovechar las oportunidades servidas en bandeja de plata durante la temporada regular y no acabar de convencer, pese a las victorias, en los dos últimos envites del curso. A pesar de ganar in extremis ante Villarreal y Oviedo, el cuadro granota hubo de abonarse a la épica para meterse en el play-off en el tercer sillón del campeonato y eso hizo guardar cierta intercidumbre de cara a la visita a Albacete. El cuadro de Rubén Albés, feliz y lanzado -aunque sin el impacto del mes de abril- amenazaba, además, con mantener la teoría del sexto clasificado, el que más ha triunfado históricamente desde que la fase de ascenso se reinstaurara hace doce campañas en el fútbol español.
Sin embargo, el equipo ha recuperado todo el amor propio tras el golpe sobre la mesa en tierras manchegas. Fue una victoria parecida, en lo anímico, a la ejecutada ante el Alavés en el Ciutat, aquella que puso al club en el camino para el ascenso directo pese a que, a la postre, se errara el tiro en oportunidades clave. Entonces se disiparon fantasmas tras un tramo complicado de tres puntos de doce posibles. El equipo, eso sí, arrrancó con dudas en casa del Alba. Tantas, que recibió el primer puño al mentón cuando Djetei puso por delante a los locales. Al final, se acabó encontrando un tesoro demasiado enterrado a lo largo de la temporada: la calidad individual.
El Levante alberga la segunda plantilla con mayor valoración de la Segunda División -tras la del ya ascendido Granada- y los Joni, Pepelu, Brugui y, sobre todo, De Frutos aparecieron para dictar sentencia. La reaparición del segoviano es la luz que más ilumina al conjunto de Orriols de cara, no solo a la vuelta de la semifinal este miércoles -cuando el coliseo levantinista volverá a estar hasta la bandera-, sino a la final del play-off, también con regreso como local. De Frutos reedita uno de sus momentos más brillantes del año justo en las circunstancias en que la plantilla más necesita de piezas diferenciales.
Así que el grupo trabaja con la tensión del que se juega la vida, pero con una sonrisa. El duelo de mañana es un buen momento para enganchar a los menos creyentes con las contradictorias sensaciones del final de temporada en la mano. Y entre los esbozos de alegría, aparecen noticias positivas para Javi Calleja en forma de recuperaciones. Rober Ibáñez se entrenó ayer de manera parcial y, aunque no se espera que esté absolutamente listo para el partido de este miércoles, "posiblemente sí" de cara al encuentro del domingo en Vitoria o Eibar. Eso, lógicamente, si el Levante es capaz de sellar el pase a la final del play-off haciendo valer el beneficioso resultado extraído en la ida.
El que también estuvo en la sesión, y en su caso sí se prevé que pueda ser de la partida frente al Albacete, fue Wesley Moraes. El brasileño, que era una de las balas de inicio de Calleja en el Belmonte, se cayó de la lista una vez ya en el hotel de concentración por un virus que empezó a dar signos de presencia el día anterior al viaje. Sin embargo, Wesley entrenó y el técnico admitió, tras el triunfo del sábado, que espera poder contar con él en Orriols.