VALÈNCIA. El Levante puede acabar la jornada 16 de la Segunda División amarrado a posiciones de ascenso directo. Dependerá de dos factores: el primero y más importante es el de ganar este próximo domingo ante Las Palmas en el Ciutat de València, lo cual significaría arrebatar a los canarios la segunda plaza de la tabla; lo segundo, que antes de que el pitido inicial suene en Orriols, el Burgos no haya ganado en su partido de las 19h en El Sardinero. Además de ambas cosas, habrá de darse un detalle más: que el Eibar no le gane al Alavés, también el domingo por la tarde, por un gol más que el propio Levante ante Las Palmas. El rizo puede ondularse hasta el punto de que el cuadro de Calleja podría acabar la jornada a solo un punto del liderato.
Son conjeturas. Solo las cuentas que necesita el club para acabar la 16ª fecha del campeonato dentro de un objetivo que se ha de sellar 26 jornadas más tarde. Es demasiado pronto. Igual que para hablar del 'Levante de Calleja', como bien analizó el entrenador en una entrevista en PlazaDeportiva.com. Sin embargo, la realidad es que en 30 días del técnico de Alcalá de Henares en el banco granota, han cambiado muchas cosas.
Se ha cumplido exactamente un mes desde que Calleja cogió por primera vez a sus pupilos tras ser anunciado como nuevo preparador levantinista. El pasado 18 de octubre, fue a Buñol, conoció a sus pupilos y se presentó en sociedad en el Ciutat. Desde entonces, más allá de las dos victorias durante el interinaje de Felipe Miñambres, son cuatro triunfos y un empate al frente del equipo. Hace un mes, el Levante acababa la novena jornada de Liga a siete puntos del ascenso directo. Hoy está a solo uno y guarda en sus bolsillos la posibilidad de asaltar el segundo puesto.
Para Calleja, amanecer el próximo lunes en segunda posición sería un premio al trabajo, una muestra de que "se están haciendo las cosas bien". Pero también advierte, otra vez, de que nadie sube en la jornada 16, algo que también repitió Mehdi Nafti en innumerables ocasiones para restar crudeza a la concatenación de malos marcadores. Uno de los titulares que dejó el técnico madrileño fue relacionado con la confianza que tiene que tener su Levante, pero de la que no ha de abusar: "En esta categoría, si sacas demasiado pecho, te lo hunden". Por aquello de que el conjunto granota es hoy el más temible del campeonato.
Una de las premisas que Miñambres dejó ver entre sus cercanos en el club a la hora de escoger el relevo de Nafti fue la de dar con una figura que hiciera a la plantilla creerse mejor de lo que es. No bastaba entonces con ser el roster más valorado de la Segunda División, sino que hacía falta despojarse del miedo a perder inyectado desde el pasado curso. Con esa línea marcada, Calleja se activó en lo alto de la lista del director deportivo, tras haber sido uno de los candidatos del proceso de selección que el astorgano inició el pasado verano, que hizo volar por los aires al entrenador de aquel momento y que desembocó con el franco-tunecino al timón. Calleja llegó sin experiencia en Segunda, algo que hizo dudar a parte del levantinismo respecto a la idoneidad de su nombre para alzar una situación a la que, de momento, se le ha dado la vuelta... en solo un mes.